12 julio 2005

Guerra de marcas


Quienes visiten Bosnia no tendrán necesidad de preguntar si un nativo es serbio, bosnio musulmán o croata. Podrán determinarlo observando la marca de cigarrillos, cerveza o teléfono móvil que utilice. Diez años después de la guerra, casi todas las marcas comerciales son exclusivas de una u otra etnia. Y como muestra: las lealtades de los tres proveedores de telefonía móvil. Sus precios son casi idénticos, como el servicio que proporcionan. Sin embargo, casi sin excepción, los musulmanes utilizan el operador de Sarajevo, los serbios el de Banja Luka y los croatas la empresa con sede en Mostar. "En cierto sentido, aquí se sigue librando una guerra", dice Asim Metiljevic, redactor del semanario de Sarajevo Slobodna Bosna. "La gente no quiere contribuir a la prosperidad económica de los que estaban en el otro bando durante la guerra". La pregunta es si el libre mercado puede superar los odios étnicos ancestrales, pero aún es demasiado pronto para contestar.

Fuente. Foreign Policy