13 noviembre 2005

Sobre Francia, otras voces

Hemos analizado y opinado sobre los disturbios franceses desde nuestra óptica europea. Pede ser útil reflejar algunas de las cosas que se han escrito en África sobre este asunto:

1-. En la "Nouvelle expression" de Camerún puede leerse: "El hecho de que dos importantes acontecimientos se han producido de manera simultánea, como la repatriación a Marruecos de los candidatos a emigrantes en Europa con Francia como destino principal, y la revuelta llevada a cabo por los jóvenes franceses que son, como se dice púdicamente, el resultado de la inmigración, nos sitúa ante las dos caras de una misma moneda [...] Existe un vínculo entre las dificultades de integración de "los hijos de la emigración" en estas "Repúblicas", que utilizaron a sus abuelos y a sus padres como carne de cañón o como mano de obra [...] y la condena a la emigación clandestina que sufren quienes sueñan con otro lugar en el que vivir [...] La "tolerancia cero" de Sarkozy está llevando a Francia al límite de la explosión social"

2-. En el diario argelino El-Watan podemos encontrar las siguientes palabras: "Hace muy poco tiempo recurrían al Napalm en algunas colonias; hoy les escuchamos decir que limpiarán sus calles de chusma [...] ¿Debemos hablar de discriminación de Estado? Porque, a fín de cuentas, ¿qué significa llamar a la gente que vive en los suburbios franceses "chusma"? Son ciudadanos franceses, nacieron allí, estudiaron allí, allí pagan sus impuestos [...] Sus padres exiliados dedicaron los mejores años de sus vidas a defender y construir la Francia actual"

3-. En el periódico tunecino "Le Quotidien de Tunis": "El inmigrante vive un sufrimiento intolerable. Un sufrimiento que, ni el poder político francés ni el del resto de los países europeos, ha sabido medir, y que hoy sale a la luz brutal y frontalmente".


4-. En Costa de Marfil, donde las relaciones con Francia son más tensas, el rotativo "Notre voie" recurre al sarcasmo: "Aquí está la gran Francia enfrentándose a una rebelión protagonizada por los hijos de los inmigrantes que se niegan a reunirse con Sarkozy, pero que aceptan sentarse con Villepin..."

Vía: Libération