02 febrero 2006

Pares o nones

Eduardo llama al portero automático de mi casa. Viene con los juegos reunidos Geyper bajo el brazo. Cierro el libro de naturales, destino: un banco del parque:

1-. Siempre desconfió de la gente que comienza sus intervenciones diciendo: “voy a ser breve”. Odio las mentiras.

2-. Siempre consigue sacarme mis peores instintos cualquiera que diga “entre comillas” haciendo simultáneamente el gesto con las manos.

3-. Siempre sonrío cuando alguien reconoce que le gusta la canción “sufre mamón” de los Hombres G. Si además consigue vencer al vértigo y canta, siento que me encuentro ante el principio de una gran amistad.

4-. Siempre hago una bolita con el sobre de azúcar del café y trato de encestar en la papelera del bar. Si acierto lo celebro salvajemente, quiero abrazar a todo el mundo porque el milagro ha ocurrido en el último segundo del partido que íbamos perdiendo de un punto. We are the champions my friend. No muevo un músculo. La intimidad, es lo que tiene.

5-. Siempre que veo a un cura –mejor si es obispo- le cambio mentalmente su indumentaria por un uniforme militar y Vicerversa (autores, por cierto, de aquella gran canción: “tu piel morena sobre la playa nadas igual que una sirena; tu pelo suelto moldea el viento, cuando te miro me pongo contento”). Funciona también con nueve de cada diez dirigentes del Partido Popular.

Mis cinco nominados para entrar en la casa son:

25 de marzo

Viramundeando

Disculpas aceptadas

Netoratón