02 noviembre 2006

El relevo tranquilo

La pregunta tras la jornada electoral catalana parece ser si Zapatero sale o no sale reforzado. Es curioso, quienes la promueven hoy no hicieron lo mismo cuando el Partido Popular fue derrotado en Galicia hace unos meses. ¿Fue aquello una derrota de Rajoy?
En mi opinión, Zapatero había ganado su partida casi antes de jugarla: a las elecciones se llegó con el estatuto aprobado, con un Carod Rovira én vía muerta, con un Partido Popular anulado para muchos años en Cataluña y, quizá lo más importante, con un relevo en la dirección del PSC que hace tres años parecía, simplemente, imposible.
Nadie sensato podía esperar que ese relevo no fuese a tener consecuencias electorales. El resultado no es sorprendente, menos si se compara el primer resultado que cosechó Maragall con el que ha logrado un Montilla. Pero las cifras se sitúan en la orquilla deseada: el relevo tranquilo se ha terminado y el PSC mantiene las mismas opciones que hace tres años. Porque los tres posibles pactos son los de entonces pero con dos pequeñas diferencias: quien Gobierna en España es el PSOE, y Montilla mantiene una verdadera relación de confianza con un Zapatero que debe estar pensando que las cosas están como estaban, pero mejor.