en pie de paz

ETA dijo ayer con palabras lo que dijo en la T4 con una bomba: termina un alto el fuego que era permanente, un alto el fuego en el que asesinó a dos personas.

Sus palabras no valen para erosionar nuestros valores. Sus balas no valdrán para erosionar nuestro valor. La valentía está del lado de quienes trabajan por la paz en el marco de las reglas de juego democrático. Por eso no dejaré de creer que todos los procesos de paz son siempre útiles, incluso cuando no llegan a buen puerto.

Guardo intacta mi esperanza. Mantengo inalterable mi confianza en la ley, en las fuerzas y cuerpos de seguridad de nuestro estado. Conservo limpio mi deseo de que haya unidad de los demócratas en la lucha contra el terrorismo. También hoy, también en la adversidad, me mantengo como la inmensa mayoría de la ciudadanía vasca y española: en pie de paz.