10 septiembre 2009

punto mov

Dos palabras claves en nuestra vida -motivación y emoción- comparten la misma raiz latina: movimiento. No es casual.

En retórica política persiste todavía la tentación de elaborar discursos en serie y "en serio", folios y folios de justificaciones, compendios de cifras y otros ingredientes precongelados. Y es habitual que quienes escriben como elaborando la lista de la compra, desdeñen el "lirismo", el "buenismo", de quienes consideran que las emociones, motivan, mueven montañas.

La ciencia arroja cada vez más luz sobre el lado oculto de nuestra psique, la mente apasionada. Así lo demuestran los estudios neurológicos y así puede refeljarse, cada vez con más nitidez, en las campañas publicitarias. Con todos los avances en el ámbito del conocimiento suele ocurrir lo mismo: el peligro o la oportunidad no está en lo que se inventa o en lo que se descubre, sino en las convicciones de quien lo utiliza. Y el hecho cierto, es que tras la industria, fue la derecha política quien decididió situar la gestión de las emociones en el centro de su estrategia de comunicación.

Hay otras redes. Además de las sociales, las neuronales, las emocionales. Emite tu propia señal, el progreso también es un estado de ánimo.



Imagen del post: publiverso -compañía de seguros de vida-
Posteado mientras escuchaba "Slow moves" de José González