17 noviembre 2009

de Azaña a Camps

Quizá esté cerca la hora, de que los ciudadanos progresistas que escribimos y hablamos de política, enmarquemos nuestros mensajes sobre Camps de otra manera.

Probablemente, necesitemos palabras más pulidas, menos centradas en la reacción -ante el espectáculo y el personaje- y más enfocadas a la acción cívica, a la regeneración de la política valenciana. Lo pensé ayer, después de leer las siguientes palabras de Azana en 1935:

"... Ocurre en este asunto un fenómeno singular, como para creer que a todas esas gentes que se quejan, en el fondo les gusta que les expolien. Yo creo que en el fondo les gusta, y que esa actitud de saqueo del interés privado, ostentando y poniendo en circulación la fuerza de la influencia del Poder público, lo toman las víctimas como una demostración de la potencia y la autoridad del Poder, y que si esa demostración no existiese pensarían que, tal vez, ese Poder es de mentirijillas.

Porque hay muchas gentes en España que conciben la administración y el gobierno como un conjunto de bajalatos, a los cuales se manda un hombre, más o menos, prepotente y hábil, con una carta blanca para su explotación ordenada. Y cuando esto no existe y se les pone en situación de libertad crítica e igualdad de derechos, creen que es una abdicación de la potestad del Gobierno".


Libro: "De la cárcel al poder -Discursos de Manuel Azaña en Política-", editorial Eneida.
Video "The last shadow puppets" playing "My mistakes were made for you.