04 mayo 2010

principio de acumulación

Al pasear por Jerusalén, resulta algo más fácil aproximarse al principio de acumulación. Y preguntarse porqué nos cuesta menos comprender algunas cosas que otras.

El comportamiento de los fluidos, por ejemplo.

Sin demasiado esfuerzo, entendemos el modo en que el miedo y el malestar se extienden hasta abarcar todo un espacio y hacerlo irrespirable. Hasta la violencia en cualquiera de sus formas.

Sin embargo, quiero vivir creyendo que lo mismo ocurre con las demás emociones. Con el amor, con el deseo.

Expansión. Acumulación. Relámpago.