08 junio 2010

Relatividades


Me pregunto sobre el ritmo narrativo de la gran mayoría de la información y el entretenimiento que nos rodea. Sobre los efectos de tanta uniformidad en nuestra forma de procesar la realidad y construir los relatos íntimos y colectivos.

No parece improbable que nuestro tiempo emocional esté perdiendo elasticidad. Sin embargo, la relatividad existe. Acumulación y erosión, por ejemplo. Quizá convenga tratar de ampliar los tempos en nuestros modos de mirar y hacer las cosas. Buscar y encontrar el compás que late en cada proceso. Y, entonces, canalizar la armonía o darle alas a la distorsión.