19 diciembre 2011

será entonces

A veces la vida se encarga de enseñarnos que tiene que faltarnos algo, o que tiene que faltarnos alguien, para que nos demos cuenta de su valor.

Ocurrirá con Zapatero. Abriéndose paso por entre lo cotidiano, como sólo puede extenderse lo que llena, inevitablemente, crecerá en la memoria. Está escrito.

Cada día, habrá que defender cada conquista. Hoy todavía todo está, aunque nada esté garantizado para siempre.

Cada paso habrá que darlo sin tenerle como pararayos. Pararayos del rencor y la grosería humana, de la grosería económica, de la grosería política y social.

No sólo al verle o escucharle, más de una vez podrá sentirse el peso de la generosidad hecha silencio. Será entonces.

Entonces, quienes le negaron, tendrán que reconocer que nadie arriesgó más de sí mismo para domar a la adversidad, y que nadie como él defendió lo que no puede tener dueño, lo que también es tuyo.

Quienes le culparon, tendrán que ver a los verdaderos culpables mejor armados.

Y quienes le seguimos, tendremos que preguntarnos si llegó a existir la posibilidad de hacer más de lo que hicimos.