28 abril 2008

la mitad de las cosas

La liberación de los tripulantes del barco persquero español secuestrado en las costas de Somalia ha sido rápida y pacífica, eficaz y eficiente. Afortunadamente, no fue necesario recurrir al uso de la fuerza -lo que habría puesto en peligro la integridad de nuetros conciudadanos-, fue suficiente llevar a cabo un despliegue diplomático discreto que propició una negociación y desembocó en una liberación sin incidentes.

Tras una situación como esta, sensible, extremadamente delicada, corresponde a la ciudadanía evaluar la labor del Gobierno y, también, la de los demás actores políticos de nuestro país. En mi opinión, el indicador más fiable para examinar el trabajo del Ejecutivo es el nivel de satisfacción de nuestros compatriotas liberados y de sus familiares, mientras que para analizar a la oposición basta con fijarse en su actitud.

La forma y el fondo de las declaraciones efectuadas ayer por Soraya no son una razón para la Esperanza. No lo son por dos motivos: en primer lugae porque sirven para reflejar la voluntad política de la derecha en esta legislatura que comienza -se mantiene el "todo vale-; y en segundop lugar porque esa actitud invita a situarnos ante un dilema preocupante: ¿habría actuado de una manera diferente un hipotético Gobierno del Partido Popular?, de ser así, ¿Cómo?, ¿Habrían reeditado el modus operandi de la intervención en Perejil?, ¿o habrían reaccionado de una forma parecida a la que ha seguido el Gobierno de España?, de ser así ¿Porqué?, ¿Porqué todavía el ruido y la furia?

Creo recordar que fue Aristóteles quien dijo que los principios son más de la mitad de las cosas. Ya vemos como inicia la derecha, en el Parlamento, en su propia casa, este tiempo que debería ser nuevo, con la misma política vieja y frentista de siempre.
Fotograma "La ley del sielencio", de Kazan.
Escrito mientras escuchaba "Menos tú" de la Mala Rodríguez

Etiquetas: , ,